El número de hogares que, en España, cuentan con una Smart TV conectada a Internet lleva aumentando desde 2013. En apenas una década, los ciudadanos que tienen televisiones inteligentes con conexión activa a Internet han pasado de representar el 4,3% de la población a alcanzar el 64,1%. De hecho, según informa Statista, el mayor aumento se produjo entre 2020 y 2021, año en que la mitad de la población española ya disponía de una televisión de estas características conectada a Internet.
Aunque la Smart TV ofrece para muchos ciertas ventajas que las televisiones convencionales no proporcionan, también supone para otros un motivo de preocupación: las Smart TV pueden ser un objetivo más para los hackers. María Florencia Merlo, profesional especializada en el periodismo de datos, indica que la compañía de seguridad Kaspersky ha informado de que, en los últimos dos años, una tercera parte de las empresas encuestadas ha sufrido ataques que han puesto en juego sus niveles de ciberseguridad. Es comprensible, pues, que ante casos así, quienes deciden tener una Smart TV en el hogar se pregunten cómo pueden proteger los datos personales que los hackers podrían rastrear a partir de las cuentas que sus familiares y amigos tienen en YouTube, Netflix o en el resto de las aplicaciones integradas en la Smart TV.
Una solución efectiva que puede ayudar a minimizar riesgos es instalar una VPN en la Smart TV. Entre las funcionalidades principales de la VPN se incluye permitir a la persona ver canales como La 1 a pesar de estar fuera de España. A continuación, ofrecemos más información sobre los usos que se le pueden dar a la VPN y sobre cómo ésta puede ayudar a proteger la Smart TV de posibles hackers malintencionados.
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Conectar la Smart TV a la red pública
La Smart TV o televisión inteligente es como el smartphone o el smartwatch: un dispositivo más, sumamente moderno, al que se le han integrado una serie de funcionalidades adicionales que hacen de ella una televisión con opciones propias de un ordenador. Su característica más particular es la posibilidad de conectar la televisión a Internet, lo que significa que la red a la que accede la Smart TV puede ser privada, pero también pública.Aunque no sea algo habitual, podría darse el caso de que, para ahorrarse un dinero al mes, alguien decidiera utilizar una Wi-Fi pública para la Smart TV. La VPN permite, en este caso, no dejar rastro de las descargas hechas desde la Smart TV, pero también, y ésta es una utilidad que puede extrapolarse a los casos en los que se utiliza una conexión a Internet privada, la Smart TV con VPN instalada posibilita cambiar la dirección IP.Al modificar esta dirección, que es la que permite identificar a los dispositivos cuando navegan por Internet, la VPN otorga al usuario una privacidad extra. De este modo, las empresas a quienes pertenezcan las páginas web, que los usuarios de Internet visiten a través de la Smart TV, no vincularán la dirección IP real de la Smart TV con los datos recopilados a través de las cookies y otros métodos procedentes de los internautas.
Ver contenido bloqueado en el país
Configurar una VPN para la Smart TV permitiría poder acceder a contenido bloqueado en un país o, simplemente, no disponible. Hay canales que pueden ser de difícil acceso en ciertas regiones. Por ejemplo: las cadenas de televisión nacionales. La 1, Antena 3, 24 horas, Cuatro… son todos canales de TV de ámbito nacional. Así pues, es muy probable que no estén disponibles en otros países. Para solucionarlo, empresas como VPNpro asesora a las personas interesadas en instalar una VPN en una Smart TV sobre qué software sería el más indicado en su caso particular y qué proveedores, los más recomendables.
¿Cómo configurar la VPN para este caso?
La Virtual Private Network o red privada virtual es un servicio. Por tanto, el primer paso es contratarla, asegurándose a la vez de que es compatible con la Smart TV en la que se pretende utilizarla.Hay algunas VPN que cuentan con aplicaciones desarrolladas que se descargarían directamente en la propia televisión inteligente. Esta opción es muy sencilla porque no requiere de ningún software, sino de una cuenta que el propietario de la Smart TV crearía dentro de la propia app de la VPN. Una vez la cuenta está creada y verificada, sólo queda dar el último paso: seleccionar de una lista de varios países aquel a cuyo servidor se quiere conectar la Smart TV.
De este modo, cuando la persona navegue por Internet, o utilice las aplicaciones instaladas en la Smart TV que necesitan conexión Wi-Fi, la IP del dispositivo habrá cambiado y, entonces, ninguna empresa relacionará a la Smart TV con el servidor de su país original. Esto hace que dichas empresas, plataformas y cadenas de televisión entiendan que la Smart TV está accediendo a ellas desde un país autorizado a ver su contenido; algo indispensable para, en efecto, poder ver programas independientemente del país donde uno se encuentre.